La elección vocacional es una expresión de la personalidad,
pero también el resultado de un proceso de búsqueda en el que puede ser útil
alguno de estos consejos. Lo fundamental para elegir la carrera adecuada es
conocer nuestros propios intereses y habilidades, puesto que esta decisión se
relaciona con la identidad de cada uno. La información, con respecto a lo que
ofrece el mercado de las universidades, es vital para escoger la opción más acertada.
Contar con todos los datos abre el espectro de las
posibilidades. A pesar de las presiones por elegir la carrera correcta
hay que tener claro que siempre existe el derecho a equivocarse y aprender de
esa experiencia.
Elegir una carrera no es un tema fácil. Pero querámoslo o
no, al salir de cuarto medio tenemos que tomar una decisión. Qué estudiar,
a qué dedicarse en el futuro o cómo nos vemos en unos años más son preguntas
clave de este tiempo. Muchos hablan de “vocación” y uno se pregunta qué y cómo
se descubre cuál es la propia.
Expertos recomiendan escuchar la “voz interna”, dejar de atender presiones ajenas e intentar descubrir qué es lo que realmente nos gusta, cuáles son nuestros sueños y en qué áreas nos vemos desarrollando nuestros talentos.
En ese sentido, la elección vocacional es una expresión de la personalidad, es una decisión que se relaciona con la identidad de cada uno. De ahí que, en la medida que podamos tener claro cuáles son nuestros intereses y habilidades, más cerca vamos a estar de acertar en una futura elección profesional.
Conocer qué posibilidades ofrece el mercado, qué ramos se estudian en cada carrera o cuáles son las actividades generales que desempeña un profesional de la que se está mirando o en qué ámbito ejerce su profesión u oficio, son temas relevantes.
Otro factor importante es el sistema de ingreso, los puntajes exigidos de la psu, la ponderación de las notas de la enseñanza media y la posibilidad o no de exámenes adicionales.
Si tenemos dudas, seguramente conocemos a más de un profesor o un orientador al que podamos hacer preguntas. También nuestros papás pueden darnos una mano, ya que nos conocen desde chicos.
Pero no falta quien se resiste a tener más información argumentando que “mientras más alternativas conocen, más se confunden, ya que cada opción les parece interesante”. Esto ocurre especialmente con personas que tienen buenas calificaciones y suelen ser “buenas para todo”. Pero siempre algo mueve más que otra cosa. Y, en ese sentido, la elección profesional es un proceso que debe partir por el reconocimiento de los intereses y es muy frecuente que aparezca una gran confusión al término de la cual se suele llegar a la elección propiamente tal. Cuando eso ocurre, se produce un reconocimiento más realista de las propias habilidades e intereses y también de las posibilidades reales.
Estamos hablando de una elección a largo plazo, la carrera u oficio elegido va a constituir parte de un estilo de vida. Desde este punto de vista los estudios son un medio y no un fin en sí mismos. Este concepto es muy importante al momento de enfrentar el tema para no mirar sólo el corto plazo. Pero si al final uno igual sigue inseguro, hay que destacar que siempre existe el derecho a equivocarse y a aprender de esa experiencia.
Expertos recomiendan escuchar la “voz interna”, dejar de atender presiones ajenas e intentar descubrir qué es lo que realmente nos gusta, cuáles son nuestros sueños y en qué áreas nos vemos desarrollando nuestros talentos.
En ese sentido, la elección vocacional es una expresión de la personalidad, es una decisión que se relaciona con la identidad de cada uno. De ahí que, en la medida que podamos tener claro cuáles son nuestros intereses y habilidades, más cerca vamos a estar de acertar en una futura elección profesional.
Conocer qué posibilidades ofrece el mercado, qué ramos se estudian en cada carrera o cuáles son las actividades generales que desempeña un profesional de la que se está mirando o en qué ámbito ejerce su profesión u oficio, son temas relevantes.
Otro factor importante es el sistema de ingreso, los puntajes exigidos de la psu, la ponderación de las notas de la enseñanza media y la posibilidad o no de exámenes adicionales.
Si tenemos dudas, seguramente conocemos a más de un profesor o un orientador al que podamos hacer preguntas. También nuestros papás pueden darnos una mano, ya que nos conocen desde chicos.
Pero no falta quien se resiste a tener más información argumentando que “mientras más alternativas conocen, más se confunden, ya que cada opción les parece interesante”. Esto ocurre especialmente con personas que tienen buenas calificaciones y suelen ser “buenas para todo”. Pero siempre algo mueve más que otra cosa. Y, en ese sentido, la elección profesional es un proceso que debe partir por el reconocimiento de los intereses y es muy frecuente que aparezca una gran confusión al término de la cual se suele llegar a la elección propiamente tal. Cuando eso ocurre, se produce un reconocimiento más realista de las propias habilidades e intereses y también de las posibilidades reales.
Estamos hablando de una elección a largo plazo, la carrera u oficio elegido va a constituir parte de un estilo de vida. Desde este punto de vista los estudios son un medio y no un fin en sí mismos. Este concepto es muy importante al momento de enfrentar el tema para no mirar sólo el corto plazo. Pero si al final uno igual sigue inseguro, hay que destacar que siempre existe el derecho a equivocarse y a aprender de esa experiencia.
Teorías de la elección vocacional
Las teorías y enfoques proporcionan ayuda al profesional y
una base para dirigirse en la investigación así como calidad de su proceso y
eficacia, aunque no todas sean así se estima deberían. Detrás de cualquier tipo
de intervención orientadora debe de haber una base teórica formal, y esta
presenta una concepción filosófica de la realidad, del conocimiento, de la
persona y de los valores, así como la teoría para la intervención (álvarez, m.
1995).
Existen varias concepciones sobre las teorías de la elección
vocacional; para el área de la orientación son un gran aporte; y es necesario
conocer las mismas para mejora las consultas vocacionales. La distinción de
crites se convierte en marco de referencia para otros escritores e
investigadores.
Clasificación
Según john o. Crites, karen 1974, capítulo 3; se clasifican
en tres:
No psicológicas
Son aquellas en que el individuo elige por el funcionamiento
de algún sistema exterior (fenomenología). Se pueden clasificar en tres
diferentes tipos:
A. Casuales o fortuitos: esto quiere decir que no se
propuso deliberadamente ingresar en su actual ocupación, o sea, que hubo una
exposición no planificada a estímulos poderosos (ginzberg y otros 1951). Por
ejemplo, guerras, enfermedad,
depresión económica.
B. Las leyes de la oferta y la demanda: también
mencionadas como teorías económicas, nos refieren a la distribución de los
individuos de acuerdo al auge que las ocupaciones demanden. El individuo elige
la ocupación que piensa le trae más ventajas. Según h. F. Clark (1931) esto es
un problema, primero porque el individuo no está bien informado sobre las
posibilidades que tiene, y segundo porque, una carrera donde gana más, es más
costosa económicamente en su preparación (instrucción de nivel superior).
C. Las costumbres e
instituciones de la sociedad: también llamadas teorías cultural y
sociológica de la elección vocacional, citan que el factor más importante que
determina la elección del individuo es la influencia de la cultura y la
sociedad en la que vive en conformidad con las metas y objetivos que aprende a
valorar (como en las culturas donde la elección de pareja y vocacional se
define por los padres o bien siguiendo un patrón de historia familiar). Dentro
de una cultura existen muchas subculturas, lo más importante de esto es la
clase social donde se ubica el individuo, ya que él mismo aprende que ciertas
clases de trabajo son más deseables desde el punto de vista social que otras.
Seguido de esto, la fuerza que ejerza la comunidad sobre el individuo, en
especial los grupos de pares y las realidades en las que se encuentran. Mcguire
y blocksma (1953) señalaron tres grupos de roles de compañeros: “los de arriba”
que provienen principalmente de los estratos sociales más altos, sus “rayos” o
seguidores y los “cerebros” que son reconocidos y respetados por sus proezas
intelectuales pero no son aceptados. Los primeros desean terminar sus estudios
y continuarlos para ingresar en una ocupación profesional o de nivel directivo,
los que les siguen desean salir cuanto antes del colegio y/o abandonar los
estudios, sus actividades tienen poca conexión con los estudios excepto por los
deportes. Finalmente las “parias”, se esfuerzan por estar entre los de arriba
pero se vuelven marginados y los “salvajes”, que ganan fama por medio del vandalismo.
Por otro lado la escuela, después de la familia, probablemente es el agente más
importante de socialización y de vocacionalización (crites, 1958). A través de
ella el individuo adquiere una serie de valores que influyen directamente en la
elección vocacional. La familia es otro de los factores, la aceptación,
concentración o rechazo que esta le da a las ocupaciones influye mucho en la
elección del sujeto. Rivas(1976), señala cuatro aportaciones: 1) la persona
está sometida a una serie de condicionantes que son quiénes deciden su elección
profesional; 2) la clase social a la que pertenece limita el nivel de
aspiraciones de la persona y le impide, a veces, hacer un tipo de elecciones
adecuadas: 3) en determinados casos el propio hogar , los roles profesionales y
los medios de comunicación, actúan como factores de presión ante la persona, y
4) los factores económicos también pueden facilitar, o no la elección.
Psicológicas
Se concentran en el individuo, afirman que la elección es
determinada principalmente por las características o funcionamiento del
individuo y solo indirectamente por el contexto en que se desarrolla. Estas se
subdividen en cuatro teorías fundamentales:
Teoría de rasgos y factores.
Basada en la psicología de
las diferencias individuales y el análisis de las ocupaciones. Subrayan la
relación entre las características personales de un individuo con su selección
de una ocupación. Parsons (1909) explicó que es un proceso de tres pasos: 1.
Comprensión de sí mismo 2. Comprensión de las oportunidades laborales 3.
Relación de hechos del primero con el segundo.
Teorías psicodinámicas
Se refiere a “cualquier sistema psicológico que se esfuerce
por obtener una explicación de la conducta en términos de motivos o impulsos” o
que describe “un proceso psicológico que está cambiando o que está causando
cambio”. Es decir, el factor más significativo en la elección vocacional es una
variable motivacional o de proceso.
Teorías psicoanalíticas de la elección vocacional: el
individuo se adapta a las expectativas y costumbres sociales sublimando los
deseos e impulsos que experimenta como un resultado de su naturaleza biológica.
Así el trabajo de uno refleja su personalidad; y se considera el trabajo como
una sublimación. De acuerdo con estas teorías, el adolescente debe tener una
estimación adecuada de sus capacidades, sus puntos fuertes y débiles, de manera
que pueda establecerse objetivos alcanzables, siguiendo el “principio de
realidad” y no el “principio de placer”, y postergar la gratificación inmediata
de sus necesidades a fin de lograr sus objetivos.
Teorías de la elección vocacional basadas en la satisfacción
de las necesidades: estas se sustentan con la teoría de erik
erikson (según roe) y otorgan atención primaria a los deseos y
necesidades que estimulan al individuo a preferir una ocupación a otra; de
manera que son las de orden más elevado las que desempeñan un papel
significativo en la motivación de la conducta vocacional.
Teorías de la elección vocacional basadas en el concepto de
“sí mismo” (self): el sí mismo es lo que la persona “es”, entendiendo así al
“yo” como las características personales del individuo tal y como él las ve, en
tanto que el “mí” refleja la reacción de los otros ante el individuo. Entonces,
a lo largo de su vida el individuo desempeña una variedad de roles que
le proporcionan la oportunidad de descubrir qué es y qué quiere ser. En las
actividades del juego y del trabajo, pone a prueba sus habilidades y las evalúa
en contraste con sus logros y las reacciones de los otros. Descubre que hace
algunas cosas bien y obtiene de ellas un sentido de satisfacción y
gratificaciones por parte de los otros (también basa sus teorías en las
de erik erikson y el proceso de desarrollo
humano)
Teorías evolutivas de la elección vocacional
Proponen que las decisiones tomadas en la selección de una
ocupación, se toman en diferentes momentos de la vida de un individuo, y que
constituyen un proceso continuo que comienza en la infancia y
termina en los primeros años de la adultez.
La teoría de ginzberg: igual que cater plantea que los
intereses cambian y evolucionan con la edad, así las teorías actuales del
desarrollo vocacional postulan que las conductas de la elección maduran a
medida que el individuo crece. Este relaciona el yo en funcionamiento con el
desarrollo del proceso de elección, identificando algunas de las tareas que
enfrenta el adolescente al decidir una vocación, especificando las presiones
que dificultan el cumplimiento de estas tareas, y describiendo los apoyos disponibles
para soportar las presiones. Así también, postergando la necesidad de
gratificaciones que tiene presente, entre otras tareas.
La teoría de donald super: utilizó
principios de la psicología diferencial y fenomenología para describir y
explicar este proceso de elección. Pone más énfasis que ginzberg en la elección
vocacional como proceso y sugiere que el término desarrollo sea utilizado “más
como elección porque comprende los conceptos de preferencia, elección, ingreso
y adaptación”. También introdujo el concepto de “madurez vocacional” para
señalar el grado de desarrollo individual desde el momento de sus tempranas elecciones
de fantasía durante su niñez hasta sus decisiones acerca de su jubilación en
edad avanzada (1955).
La teoría de tiedeman: comienza su análisis dividiendo
el proceso general de la decisión vocacional en dos períodos y luego continúa
delineando etapas dentro de cada uno de estos. Primero existe un período de
anticipación o preocupación que tiene cuatro etapas: exploración,
cristalización, elección y esclarecimiento.
Exploración: el individuo se pone al corriente de las
posibilidades y las considera. Cristalización: acepta las posibles y
rechaza las inadecuadas o imposibles. Elección:
decisión de la alternativa que tomará y seguirá. Esclarecimiento:
resuelve los detalles de cómo llevar a cabo su elección.
En segundo lugar existe el período de instrumentación y
adaptación, y que abarca tres etapas adicionales: inducción, reforma e
integración. El desarrollo de la carrera entonces, es el del sí mismo visto en
relación con la elección, el ingreso y el avance en objetivos educacionales y
vocacionales.
Teorías de la elección vocacional basadas en las decisiones:
Toma como comienzo dos características que, según afirman,
poseen todas las decisiones: 1) hay un individuo que debe tomar un decisión, 2)
hay dos o más cursos de acción de los cuales debe elegir uno basándose en la
información que tiene acerca de ellos. La estrategia utilizada para considerar
y elegir posibles cursos de acción. Están comprendidos tres pasos: 1. La
estimación de las probabilidades de éxito asociadas con los resultados de los
posibles cursos de acción 2. La conveniencia de estos resultados determinada
por el sistema de valores del individuo 3. La selección de una conducta
determinada aplicando un criterio evaluativo. Según un “diagrama
de flujo” propuesto por hilton (1962) del proceso de toma de decisión, este
se inicia con el ingreso de algún estímulo del ambiente… es importante destacar
la idea que: a medida que la gama de opciones se limita, la certeza de las
opciones aumenta.
Teorías generales
Se proponen dos de acuerdo al resultado de estudios
interdisciplinarios.
Una concepción interdisciplinaria de la elección vocacional.
El ingreso ocupacional resulta de la interacción de los dos
procesos de: elección vocacional (compromiso entre la jerarquía de preferencias
del individuo y su jerarquía de probabilidades; aspiración - realidad), y
selección ocupacional (las jerarquías las constituyen las personas y no las
ocupaciones). Existen ocho determinantes de ingreso. Los individuos difieren en
sus atributos sociopsicológicos y las ocupaciones difieren en sus
organizaciones socioeconómicas. La elección ocupacional es un proceso evolutivo
que dura muchos años… las elecciones cambian a medida que el individuo
evoluciona, y a medida que la estructura ocupacional sufre modificaciones y
reorganizaciones.
Una interpretación general de la elección vocacional.
Emplea el marco de referencia evolutivo de los períodos o
etapas de la vida para describir las diversas fases en la selección de una
ocupación y para especificar los factores culturales, sociales, de rasgos y
psicodinámicos que influyen en el proceso de elección desde la niñez hasta los
últimos años de la adultez. Así el éxito (o los errore) en las primeras tareas
lleva al éxito (o al fracaso) en tareas posteriores. Según super y bachrach: el
desarrollo profesional es un proceso psicodinámico que compara, influye y es
modificado por el desarrollo emocional, el intelectual y el social.
Teorías locales
La especificidad de la orientación vocacional en argentina:
la noción de conflicto.
La o.v.o. Surgió como una especialidad de la psicología. En
argentina, esta especialidad comenzó a desarrollarse alrededor de los años
sesenta, conjuntamente con la carrera de psicología. Histórica y mundialmente
surgió como un quehacer específico, cuando el hombre pudo empezar a elegir (y
no a heredar) su trabajo y fue necesario una mejor ubicación laboral de las
personas. La formación del psicólogo argentino siempre estuvo muy influida por
el psicoanálisis y ese fue el esquema conceptual referencial de la ovo en sus
comienzos, de la mano de pioneros como rodolfo bohoslavsky y marina müller,
entre otros. Gradualmente fue atravesada por un lado, afortunadamente, por las
teorías sociales y por otro, por las teorías del counselling, más americanas, y
los tests psicopedagógicos, los cuales le dieron un carácter más parecido a un
diagnóstico aptitudinal, con sus consecuencias de pasivización del sujeto que
elige. Actualmente, y desde el punto de vista teórico psicoanalítico tomamos en
primer lugar la noción de conflicto. Sabemos que es estructurante del sujeto.
El conflicto vocacional y la temática misma de la elección forman una de sus
manifestaciones clínicas. Esta noción teórica está en la base de la pregunta
“¿qué le pasa al consultante?”. Pesquisar el conflicto inconciente que traba la
elección y procesarlo es el trabajo necesario a elaborar en un proceso de
orientación vocacional, con las resistencias que esto conlleva.
La orientación vocacional
El término que ahora nos ocupa tenemos que dejar
patente que está conformado por dos palabras que tienen su origen etimológico
en el latín. La primera de ellas, orientación, procede del
verbo oriri que puede traducirse como “nacer”. La segunda,
vocacional, por su parte emana de otro verbo latino: vocare, que es
sinónimo de llamar.
La orientación vocacional es un conjunto de
prácticas destinadas al esclarecimiento de la problemática vocacional. Se
trata de un trabajo preventivo cuyo objetivo es proveer los elementos
necesarios para posibilitar la mejor situación de elección para cada sujeto.
La orientación vocacional puede concretarse de forma
individual o grupal, ya que supone actividades ligadas tanto a la exploración
personal como al análisis de la realidad a través de información sobre la oferta
académica y las particularidades del mercado laboral.
Por lo general, los destinatarios de la orientación
vocacional son los adolescentes que
se encuentran próximos a la finalización de sus estudios secundarios. De todas
formas, también puede estar dirigida a estudiantes universitarios, jóvenes en
general y hasta a adultos insertados laboralmente, que evalúan la realización
de formación de postgrado.
Lo más frecuente es que para ayudar a los jóvenes, sobre
todo, a encontrar esa vocación y ese camino profesional es que se utilicen, por
parte de orientadores o pedagogos, una serie de herramientas tales como los
conocidos test de orientación vocacional. Se trata de cuestionarios que están
conformados por una amplia lista de actitudes que son vitales en diversas
profesiones y ellos deben elegir mediante cuatro parámetros (nada, poco,
bastante o mucho) el interés que tienen en las citadas.
Así, por ejemplo, una de las actitudes que se pueden incluir
en dichos test es sobre qué biografía le interesa más leer. Una cuestión a la
que mediante los citados parámetros deberá responder mediante las opciones que
se ofrecen: la de un médico, la de un empresario, la de un arquitecto o la de
defensor de la naturaleza.
No obstante, además de este test que ayuda a conocer las
habilidades propias del individuo, también se suele emplear otros instrumentos
para llevar a cabo la mencionada orientación educativa. Así, se hace uso de
todo tipo de información sobre las opciones educativas existentes, cómo se
encuentra el mercado laboral, las carreras universitarias con más salidas
profesionales…
Cabe destacar que la búsqueda vocacional es una tarea
personal donde cada individuo debe reconocerse como protagonista, pero
contando con los recursos necesarios para favorecer y enriquecer esa búsqueda.
En este sentido, hay que tener en cuenta que la
vocación no es algo innato, sino que se desarrolla en el plano de la
acción, el conocimiento y la convivencia. Al adquirir diversas experiencias de
modo consciente e inconsciente, el sujeto se convence de que puede elegir por
sí mismo.
Los profesionales que asisten en la orientación vocacional
deben descubrir la singularidad de cada persona y acompañar su decisión,
sin olvidar que la tarea implica una responsabilidad para ambas
partes. La investigación sobre la historia personal, los gustos, las
preferencias y las aptitudes son claves en el proceso.
Perfil: elección vocacional y crisis de la adolescencia
Publicado el: 07-10—2013
La elección vocacional no es una decisión que surge de la
noche a la mañana para decidir nuestro futuro; por lo contrario, involucra todo
un proceso de construcción que se inicia desde que somos pequeños, donde
intervienen, nuestros gustos, intereses, habilidades, necesidades, entre otros
factores, todos ellos relacionándose unos con otros para finalmente llegar a la
decisión de seguir tal o cual carrera. Desde pequeños, nuestra vocación está
determinada por la fantasía que expresa necesidades básicas en el juego de
roles, como por ejemplo, el querer ser doctor, policía, maestro, etc. Esta
fantasía cambia un poco al llegar a l si bien la edad es un factor relativo, ya
que cada persona tiene su tiempo interno, en muchos casos podría ser un
indicador de cuándo puede estar totalmente apta para asumir una decisión madura
que involucre todos los aspectos ya mencionados. Esta elección vocacional no es
solo un evento propio de la adolescencia al terminar el colegio, sino también
por diversas causas, se puede llevar a cabo en diferentes etapas de nuestras
vidas; sin embargo es en esta etapa en especial en que se presenta con mayor
índice, pero también con mayor incertidumbre y temor a lo que vendrá.
Adolescencia: un mundo de contrastes
en el adolescente, esta elección implica una crisis de identidad, entendiéndose a ésta como la oportunidad de crecimiento e independencia en contraposición a sus sentimientos de tristeza y miedo por el término de una etapa y el inicio de una nueva y desconocida, que puede resultar amenazante. La persona se siente aquí en un estado intermedio, entre adulto y niño, con grandes deseos de autonomía e independencia pero aún con miedo de lo que pueda venir adelante, convirtiéndose en una de las dificultades para lograr una elección madura. Otros factores que también intervienen en esta etapa y que dificultan el proceso de elección son a adolescencia, donde nuestra vocación va estar más en función a nuestros gustos e intereses, para finalmente a partir de los 18 años aproximadamente, considerar también aspectos más importantes al momento de confrontar nuestras necesidades, gustos, habilidades e intereses con las oportunidades que nos brinda la situación real.
Adolescencia: un mundo de contrastes
en el adolescente, esta elección implica una crisis de identidad, entendiéndose a ésta como la oportunidad de crecimiento e independencia en contraposición a sus sentimientos de tristeza y miedo por el término de una etapa y el inicio de una nueva y desconocida, que puede resultar amenazante. La persona se siente aquí en un estado intermedio, entre adulto y niño, con grandes deseos de autonomía e independencia pero aún con miedo de lo que pueda venir adelante, convirtiéndose en una de las dificultades para lograr una elección madura. Otros factores que también intervienen en esta etapa y que dificultan el proceso de elección son a adolescencia, donde nuestra vocación va estar más en función a nuestros gustos e intereses, para finalmente a partir de los 18 años aproximadamente, considerar también aspectos más importantes al momento de confrontar nuestras necesidades, gustos, habilidades e intereses con las oportunidades que nos brinda la situación real.
La elección vocacional representa un aspecto central de
la identidad de las personas. Por lo general, es un proceso que se desarrolla
durante varios años y se va definiendo hacia el final de la adolescencia,
cuando ya se tiene mayor claridad sobre las implicancias de las preguntas
fundamentales de esta edad, que son: "¿quién soy?" y "¿qué
quiero hacer con mi vida?". Es decir, cuando la persona tiene claridad
sobre su proyecto de vida. El trabajo es esencial para el desarrollo de las
personas y la ocupación que se tenga estará muy relacionada con el uso del
tiempo, ingresos, contexto y, sobre todo, con el sentimiento de
autorrealización personal. Esta ocupación, muchas veces, es elegida en función
de las necesidades y oportunidades que se tengan; pero otras veces es circunstancial.
Sin embargo, si esa actividad, ya sea elegida o no, respeta las características
personales, sueños y metas, así como al contexto de la persona, ayudará al
crecimiento y a la satisfacción de cada uno plantearse metas y tener sueños es
un aspecto fundamental para cualquier elección. Es más, constituye el punto de
partida. Estas metas nos orientan, organizan y motivan hacia un camino
personal, el cual debe tomar en cuenta los intereses, habilidades, sueños y
posibilidades que tenemos.
La elección es el resultado de un proceso de exploración y
puesta en práctica de elecciones durante la adolescencia, de conocerse y
formular metas que lo respeten a uno mismo y a su medio. En este proceso, no se
necesita esperar hasta acabar la secundaria. Cualquier momento es bueno para
pensar en sí mismo y en lo que se quiere.
Eleccion vocacional
Es un conjunto de prácticas destinadas al esclarecimiento de
la problemática vocacional. Se trata de un trabajo preventivo cuyo objetivo es
proveer los elementos necesarios para posibilitar la mejor situación de
elección para cada sujeto (quiroz 1994). La orientación vocacional puede
concretarse de forma individual o grupal, ya que supone actividades ligadas
tanto a la exploración personal como al análisis de la realidad a través de
información sobre la oferta académica y las particularidades del mercado
laboral.
Por lo general, los destinatarios de la orientación
vocacional son los adolescentes que se encuentran próximos a la finalización de
sus estudios secundarios. De todas formas, también puede estar dirigida a
estudiantes universitarios, jóvenes en general y hasta a adultos insertados
laboralmente, que evalúan la realización de formación de postgrado. Cabe
destacar que la búsqueda vocacional es una tarea personal donde cada individuo
debe reconocerse como protagonista, pero contando con los recursos necesarios
para favorecer y enriquecer esa búsqueda.
En este sentido, hay que tener en cuenta que la vocación no
es algo innato, sino que se desarrolla en el plano de la acción, el
conocimiento y la convivencia. Al adquirir diversas experiencias de modo
consciente e inconsciente, el sujeto se convence de que puede elegir por sí
mismo. Los profesionales que asisten en la orientación vocacional deben
descubrir la singularidad de cada persona y acompañar su decisión, sin olvidar
que la tarea implica una responsabilidad para ambas partes. La investigación
sobre la historia personal, los gustos, las preferencias y las aptitudes son
claves en el proceso.
A. Definiciones
La orientación vocacional es una técnica que consiste en
proporcionar información a una persona sobre las posibilidades de educación,
formación, empleo y facilitarle el establecimiento de un plan de carrera o
profesión a través del consejo de orientación vocacional (canton 1998). La misma
que permite: la evaluación de las aptitudes, intereses vocacionales, la
personalidad, la inteligencia, etc. Mediante la utilización de los test
psicológicos.
A. Orientación
profesional
La orientación profesional es la ayuda que ofrece una
persona competente a un individuo para que tome contacto con el problema
fundamental y arduo de la elección de un modo de vida y de su adaptación
profesional. La orientación profesional es una actuación científica, compleja y
persistente destinada a conseguir que cada sujeto se dedique al tipo de trabajo
profesional, en que con un menor esfuerzo puede obtener mayor rendimiento,
provecho y satisfacción para si y para la sociedad (gonzales 1997). Así mismo
considera que la orientación vocacional parte del conocimiento integral del
individuo para elegir, entre las inmensas variedad de las técnicas
profesionales, aquella o aquellas que mejor conviene a sus características de
aptitud y vocación.
La asociación nacional de orientación vocacional de los
estados unidos, da la siguiente definición: la orientación profesional es un
proceso mediante el cual se ayuda a un individuo a elegir su ocupación, plasmar
la preparación de la misma e ingresar y progresar en ella. En resumen se puede
considerar que la orientación profesional es el conjunto de actividades que se
desarrollan para asistir al individuo en la búsqueda de la elección profesional
u ocupacional que más se adapte a sus posibilidades internas y externas, es
decir a su vocación, aptitudes, intereses, personalidad como factores internos
y a las necesidades ocupacionales, status social como externos.
B. Enfoques
A. Enfoque psicológico
La elección vocacional optima es aquella que trae
satisfacción personal al individuo, porque le da posibilidad de desarrollar sus
mejores aptitudes, de afirmar sus verdaderos intereses y de no contradecir la
estructura de su personalidad, además de beneficiar al grupo humano propiciando
el fomento de actividades útiles que desarrollen la comunidad social en todas
direcciones (valdez 2000). Es así que el trabajo tiene gran importancia en la
vida del hombre, que una insatisfacción, frustración o conflicto, dentro de su
esfera produce siempre un desequilibrio en toda la personalidad. Al mismo
tiempo, el trabajo debe ser fuente de mayor desarrollo y maduración de toda la
personalidad. Es por ello que la orientación vocacional se entiende como una
profilaxis, pues nada propicia las enfermedades mentales más que un trabajo
ansiogeno, tedioso, fatigante, realizado en condiciones físicas inadecuadas o
sujeto a tensiones psicológicas. En cambio una actividad interesante,
gratificante y fructífera puede compensar muchas deficiencias.
B. Enfoque educativo
La orientación vocacional debe tener siempre en cuenta el
sistema educativo y adecuarse al mismo, al mismo tiempo la educación debe
modificarse rápidamente de acuerdo con los requerimientos de la sociedad. La
orientación vocacional dese tender a elevar el nivel formativo, evitar la
deserción y lograr que la educación llegue a todos los estratos
socioeconómicos; procurar una educación diferenciada de acuerdo con los
intereses y necesidades de cada región y un mejor aprovechamiento de talentos
que deben buscarse activamente sin descuidar la formación (canton 1998).
C. Enfoque socioeconómico
La orientación vocacional debe lograr que el hombre colabore
para el progreso y el desarrollo social y económico del país. La educación para
el desarrollo cultural se la distingue de la educación para el desarrollo
económico, y los objetivos culturales se consideran el consumo, mientras que
los objetivos económicos son la inversión. De hecho que frontera nunca es
clara, pues en la medida que la educación-consumo cultiva las capacidades,
produce al mismo tiempo los efectos de la inversión.
C. Factores que inciden en la orientación
vocacional
Cortada 1977, considera que los factores que influyen en la
orientación vocacional son de índole interno y externo:
A. Factores internos
Constitución física
Nivel intelectual
Aptitudes específicas
Intereses
Nivel de conocimientos adquiridos
Experiencia
Motivación y afectividad
Pertenencia a uno u otro sexo
Vínculos familiares
Adhesión a ciertos valores
Actitudes y prejuicios frente a los objetos de elección
Tipo de personalidad, temperamento y carácter
Nivel de aspiración
Necesidad de logro
Dificultades sensoriales y motrices, etc.
B. Factores externos
Ubicación geográfica
Estrato social de pertenencia
Nivel cultural
Instituciones educativas
Fuentes de trabajo
Estructura económica, familiar, local y otros.
D. La importancia de la orientación
vocacional
La orientación vocacional, debe recordar que en la vida el
trabajo es solo un aspecto. Los deseos de progreso del hombre no se limitan a
la elección de una carrera u ocupación, son más complejos, de índole
fisiológica, psicológica, etc. De ahí la necesidad de armonizar los intereses,
las aptitudes y los rasgos de personalidad del sujeto en relación al trabajo
elegido. Otro aspecto importante es que, existen muy pocas universidades y
escuelas superiores que se preocupan en seleccionar a sus postulantes
considerando, como base fundamental sus condiciones endógenas; específicamente
sus aptitudes e intereses. Se limitan en su mayoría a comprobar solo el estado
de preparación que llevan los estudiantes de educación secundaria en base a una
prueba general. Es innegable que al igual que la elección de una carrera,
el sujeto necesita de una convincente orientación a fin de que llegue hasta la
culminación de una especialidad sin mayores dificultades, encontrándose así
mismo en el ejercicio de la misma, donde deberá constituirse en un magnifico
profesional, garantía para toda la sociedad. De ahí la importancia de la
orientación profesional, que en si trata de evitar los fracasos en la vida,
aspirando a señalar el camino correcto, a fin de que no se elija una carrera al
azar, sin tomar en cuenta sus reales aptitudes e intereses.
1. Factores internos. Se
refieren a los aspectos que son propios de tu persona y que afectan su elección
y su futuro ejercicio profesional dentro de las cuales podemos encontrar a las
aptitudes, intereses, valores, capacidades intelectuales y rasgos de
personalidad.
A. Aptitudes la aptitud es la habilidad
natural para adquirir de manera relativamente general o especifica tipos de conocimientos.
En un sentido amplio, puede ser entendido como disposición para una tarea o
trabajo. Sin embargo, en un sentido más estricto, se llama aptitud la
disposición heredada como adquirida a base de aprendizaje (merani 1987). Otro
concepto menciona que la aptitud es la facilidad para el aprendizaje de una
actividad, para ser eficiente en ella, para realizarla en menor tiempo
(uculmana).
De acuerdo a la definición de bingham en el diccionario de
psicología de warren, la aptitud es conceptualizada como “la condición o serie
de características consideradas como síntomas de capacidad de un individuo para
adquirir con un entrenamiento adecuado, algún conocimiento, habilidad o series
de reacciones como la capacidad para aprender un idioma o componer una canción.”
De tal definición se desprenden dos ideas fundamentales: en primer lugar que no
se presupone su carácter exclusivamente hereditario; es el resultado de la
herencia y del medio, en otras palabras cada individuo nace con ciertas
potencialidades e inicia su aprendizaje. En segundo término que la aptitud es
un concepto muy amplio: el cual abarca cualquier característica que predispone
al aprendizaje, incluyendo la inteligencia, la instrucción previa, la
personalidad y su interés. En otras palabras las aptitudes son susceptibles de
ser desarrolladas o habilitadas, a través del entrenamiento de las mismas.
Como podemos apreciar existen muchos criterios que se han
utilizado para poder definir lo que es la aptitud y aún continúa la disposición
sobre este punto. Pero para poder lograr una definición operacional la cual nos
ayude a tener un concepto único en la presente investigación vamos a considerar
la definición expresada por fingerman 1998: la aptitud es una disposición
general, que es innata la cual es susceptible de ser desarrollada, habilitada y
optimizada a través de la práctica y si no existiera esta, se extinguiría ya
que si todos recibiríamos la misma instrucción estaríamos capacitados para
tener las mismas aptitudes. En resumen podemos establecer que el concepto de
aptitud encierra tres características esenciales:
Disposición natural: con este término queremos decir que las
aptitudes son innatas.
Diferencia individual: esto quiere decir que los distintos
individuos poseen las aptitudes con diferentes grados de desarrollo.
Rendimiento: con el cual queremos establecer que cada
individuo es capaz de realizar trabajos específicos, cuyo rendimiento esta en
relación directa con la aptitud, el entrenamiento y la educación de dicha
aptitud.
A. Clasificación las aptitudes
pueden clasificarse en cuatro grupos: sensoriales, motrices, intelectuales y
afectivas (claparede).
· aptitudes
sensoriales: son las disposiciones para distinguir colores, percibir formas,
distinguir ruidos, reconocer y discriminar olores, sabores,
etc.
· aptitudes motrices: son las
disposiciones para realizar movimientos. ·
aptitudes intelectuales: son disposiciones de carácter psicológico, como la
memoria, l atención, la inteligencia, etc. Pero dentro de estas aptitudes
podemos encontrar otras más específicas, como la memoria visual, auditiva, etc.
Y dentro de estas otras aptitudes como memoria para colores, nombres, formas,
etc.
· aptitudes afectivas: son las
que se refieren principalmente a las disposiciones innatas para sentir y
distinguir lo agradable de lo desagradable.
Otra clasificación es la que proporciona pichot, considera
que se puede clasificar a las aptitudes según el factor que interviene:
factores de dominio de motricidad:
· destreza manual: habilidad en
los movimientos que implican brazos, manos y controlados por la vista.
· destreza digital: habilidad
en los movimientos que implican únicamente los dedos y controlados por la
vista. Visual: aptitud para
realizar con rapidez y precisión una serie de movimientos que necesitan la
coordinación viso manual. Se distingue del factor anterior por el elemento
precisión. · golpeteo:
velocidad con que el sujeto puede hacer oscilar la mano o el brazo. Se
distingue del anterior por que la precisión visual no interviene.
· ambidiestra: una aptitud para
utilizar la mano no dominante.
Factores del dominio de la percepción visual:
· espacial: es la aptitud para
percibir con exactitud configuraciones espaciales y para compararlas entre sí.
· orientación espacial: aptitud
para no ser perturbado por las orientaciones en las que se presenta una
estructura espacial. ·
visualización: aptitud para imaginarse (sin verlo) un movimiento en un espacio
tridimensional. ·
memoria espacial: memoria de las estructuras espaciales. Este factor no es la
memoria visual y corresponde únicamente a las pruebas en que el material
para memorizar tiene una organización espacial. Velocidad perceptiva:
velocidad para construir una configuración dada (que permanece presente en la
mente en el transcurso de la investigacion) en medio de una configuración
compleja. Percepción
gestáltica: aptitud para manipular dos configuraciones simultaneas o sucesivas.
Este factor presenta gran interés, pues parece sobrepasara ampliamente el
dominio perceptivo visual y aplicarse también al dominio de las estructuras
intelectuales. · alteración
perceptiva: rapidez con que altera el modo de interpretar una figura ambigua.
· estimación de las longitudes:
aptitud para estimar el largo de una línea o la distancia entre dos puntos.
Factores del dominio de la percepción auditiva: ·
integración auditiva: aptitud para diferenciar cierta cantidad de sonido.
· resistencia auditiva:
amplitud que s aplica a la vez al análisis y a la síntesis en el dominio
auditivo. · intensidad: aptitud
para discriminar la intensidad relativa de los sonidos.
· claridad tonal: aptitud para
discriminar tanto la elevación tonal como el timbre. Factores de dominio de las
funciones intelectuales superiores:
· deducción: aptitud para
razonar de los general a lo particular. ·
inducción: aptitud para razonar de lo particular a lo general.
· juicio: aptitud para resolver
un problema eligiendo entre varias posibles soluciones sobre la base de
suposiciones razonables. ·
integración: aptitud para conservar en la mente y combinar e integrar varias
condiciones o reglas, necesarias para obtener una buena respuesta.
· fluidez ideacional: aptitud
para producir en un sujeto dado, ideas tan numerosas como sea posible sin tener
en cuenta la calidad. ·
fluidez verbal: aptitud para evocar palabras lo más rápidamente posible sin
restricciones de sentido, pero con una restricción mecánica en lo concerniente
al número de letras. · fluidez
de expresión: aptitud para desarrollar una idea impuesta.
·
comprensión verbal: aptitud que abarca todos los aspectos de las comunicaciones
por medio del lenguaje. Este factor es uno de los más sólidamente establecidos
y spearman ya lo había aislado como factor de grupo.
· denominación: aptitud para la
denominación de colores, objetos, formas,
etc.· numérico: corresponde a
la aptitud para manejar números y es uno de los factores sobre el cual, el
acuerdo de incluirlo en los test de inteligencia es unánime.
· memoria: corresponde a la
memoria lenta de parejas de elementos sin relación lógica entre sí, sea cual
fuera la manera cuya retención se verifica.
· memoria inmediata:
corresponde a la cantidad de aprehensión sin fijación nménica.
· velocidad de asociación:
aptitud para asociar rápidamente un objeto y el nombre que lo simboliza.
· velocidad de juicio: aptitud
para enunciar rápidamente un juicio sobre datos, ya sea sensoriales o sociales.
· aplicación: aptitud para
ejecutar una tarea sin error a pesar de la velocidad.
B. Intereses los intereses son
manifestaciones emocionales de las necesidades cognoscitivas de la persona. Su
realización ayuda a llenar los vacios en los conocimientos, mejor orientación y
comprensión de los hechos significativos. Subjetivamente se manifiesta en un
tono emocional positivo que adquiere el proceso del conocimiento y el deseo de
conocer más profundamente el objeto significativo para la persona. El papel de
los intereses es grande pues obligan a la persona a buscar activamente medio de
satisfacción del deseo de conocer. La satisfacción del interés no conduce a su
extinción, sino a su transformación, enriquecimiento y profundización, dando
origen a nuevos intereses de más alto nivel cognoscitivo. Los intereses son
mecanismos impulsores del conocimiento.
A. Clasificacion: los intereses
pueden ser clasificados por su contenido, su fin, su amplitud y su
constancia:
a. Por su contenido: en estos se pone de
manifiesto los objetivos de las necesidades cognoscitivas y su significado real
para las metas de una actividad dada. Psicológicamente es significativo aquello
por lo cual la persona manifiesta interés y la valoración social del objetivo
de sus necesidades cognoscitivas.
B. Por su amplitud: se refiere
al grado de concentración en un campo o en la distribución entre muchos
objetivos. En el desarrollo armónico de la personalidad se suele considerar
rasgo positivo la amplitud de intereses. Es valiosa para la personalidad la
llamada “bifocalidad o multifocalidad” de intereses, o sea su subdivisión en
dos o más campos de actividades no relacionados (química/futbol), lo que es
favorable para realizar relevos de tipos de actividad, lo cual es un medio de
reponer energía gastada en el trabajo. La valoración de estrechez o amplitud de
intereses se determinan por su contenido.
C. Por su constancia: se
expresa en el tiempo que conserva un interés relativamente intenso. Son fijos
los intereses que expresan las necesidades básicas de la personalidad y se
convierten en características permanentes de su conformación. Un interés fijo
testimonia la capacidad motivadora de la personalidad y tiene valor para su
diagnostico.
Sobre la constancia del interés, se debe juzgar sobre la
base de la capacidad de superación de dificultades en la realización de la
actividad y no solo sobre la base de la autovaloración y el autoanálisis.
Cierta falta de constancia de los intereses es una particularidad de la edad de
los escolares de años superiores de la secundaria y a veces adquieren carácter
apasionado, pero poco duradero. A veces esa diversidad de criterios expresa la
búsqueda de la vocación y el descubrimiento de las capacidades.
Los intereses diversificados que en frecuentes casos se
apagan rápidamente son inherentes a la adolescencia y a la juventud y
desempeñan importante papel en la revelación de las capacidades de una
personalidad en desarrollo. Es pedagógicamente importante aquella actitud de
los educadores hacia los intereses de los adolescentes o jóvenes que suponen
profundizar y ampliar sus necesidades cognoscitivas y no la indignación por el
carácter momentáneo de sus aficiones.
Es optimo por supuesto que el escolar manifieste muy
temprano (por medio y con ayuda de los adultos) intereses específicos estables
y se desarrollen las capacidades correspondientes que le permiten determinar su
vocación sin error. Como se sabe sucede así en pocas personas. Sin embargo si
un alumno egresa sin un interés marcado y estable en alguna profesión se trata
del interés solamente y no de los conocimientos necesarios para ingresar en la
vida laboral, ni de la disposición psicológica para el trabajo de todas maneras
es mejor que si el mismo se determina de modo incorrecto o precipitado, basándose
por ejemplo en los atributos netamente exteriores de las profesiones
atractivas.con los exámenes de graduación no termina el desarrollo de los
intereses y las capacidades de un joven, sino solamente la etapa media de la
enseñanza, lo ideal es procurar que los dotes de la persona se desarrollen con
éxito, cualquiera sea su ocupación luego de graduarse y sobre todo si se ha
desarrollado la principal de las cualidades: el afán por el trabajo.
C. Personalidad
El hombre se desarrolla dentro de la sociedad y mantiene un
vínculo continuo con otras personas y con ayuda del lenguaje, se convierte en
personalidad, es decir en sujeto del conocimiento y de la activa transformación
de la realidad. La personalidad como categoría psicológica concreta representa
el nivel superior y más complejo de la regulación psicológica y participa de
manera activa en formas muy diversas de la regulación del comportamiento, las
cuales van desde la forma en que se expresan los procesos cognitivos concretos
mediante determinadas formas de motivación, hasta los niveles más complejos de
autodeterminación del comportamiento (gonzales rey). Este mismo autor afirma
“la personalidad representa un proceso permanente de desarrollo en el cual cada
uno de sus momentos está estrechamente vinculados a la situación vital concreta
que enfrenta el sujeto, quien simultáneamente forma parte de los dos sistemas
que lo implican: su subjetividad y el sistema de relaciones que lo define en su
vida social, ante los cuales mantiene una posición activa definida como momento
esencial de integración de ambos sistemas en cada nuevo momento de su
desarrollo personal. Sin embargo la capacidad de acción del sujeto en el
sentido de modificar las configuraciones subjetivas que le afectan no es una
respuesta inmediata, sino un proceso largo y complejo, dentro del cual el
sujeto va modificando gradualmente representaciones, creencias y vivencias que
le permiten enfrentar de otra forma sus vínculos ya constituidos, proceso en el
que se modifica su propia constitución subjetiva”
A. El individuo, la
personalidad y la individualidad
El concepto individuo fija el hecho de pertenecer a la
especie humana. Es un concepto biológico y es distinto del concepto psicológico
de personalidad, que define la condición de ser social, incluido dentro de las
relaciones sociales y participe del desarrollo social. El proceso de formación
y desarrollo de la personalidad tiene un carácter históricamente condicionado.
Pero es incorrecto ver a la personalidad como producto pasivo del medio social,
pues ella es un agente activo. La asimilación de la experiencia social se
realiza por medio de la subjetividad (mundo interior) de la persona, en la cual
se manifiesta la relación del hombre con su actividad y con lo que con él se
hace. La actividad se manifiesta en los motivos del comportamiento propios de
la persona en sus objetivos y maneras de actuar. Es decir la personalidad
es sujeto de su actividad.
Otro concepto vinculado al de personalidad es el de su
individualidad, por el cual se entiende un conjunto único de particularidades
psicológicas que hacen a cada sujeto diferente de los demás. Con la
individualidad está relacionado el carácter, el temperamento, las
peculiaridades del discurrir de los procesos psíquicos, los sentimientos y motivos
para la actividad y la configuración de las capacidades. La personalidad es
inconfundible en su individualidad. La persona es ante todo un hombre vivo y
concreto, con sus cualidades y defectos, engendrados por su activa
participación en la vida de la sociedad, la educación y la enseñanza. El hombre
al formar parte de diferentes grupos sociales con frecuencia cumple en ellos
funciones diferentes y juega en ellos papeles diferentes. La misma persona en
diferentes condiciones puede jugar papeles antagónicos por su contenido, pero
no siempre es así y puede también manifestar cualidades similares en
situaciones distintas. Esto último es una demostración de la integridad de la
personalidad a diferencia de sus contradicciones y amorfismos, que se muestran
en la diversidad de papeles del hombre en circunstancias diferentes. Pero a
pesar de esto último, siempre es posible dar una caracterización adecuada de la
personalidad, aclarando sus papeles fundamentales, sus posiciones vitales, los
motivos que con mayor plenitud manifiestan su individualidad.
B. Estructura biológica y
social de la personalidad. Las particularidades
relativamente constantes y relativamente variables de la personalidad forman su
estructura dinámica como una unidad compleja de elementos integrados e
interrelacionados. Estudiar la personalidad, implica resolver dos tareas
fundamentales, la primera es establecer en cada hombre las particularidades de
su personalidad individual que lo diferencian de los demás, lo que permite
predecir el comportamiento de la persona y permite conocer la estructura
concreta de la personalidad. Las exigencias prácticas de la educación y la
enseñanza, el trabajo, etc. Exigen la solución de esta tarea. Pero se plantea
otra tarea esencialmente teórica, esto es encontrar los tipos de personalidad o
sea sus estructuras más generales (abstractas). Para este último, se debe
renunciar al análisis psicológico individual y determinar sus características
mas generales. Esta tarea exige destacar cierto número de subestructuras que en
su integración forman la estructura de la personalidad.
D.
Inteligencia
a. Definiciones:
El concepto de inteligencia ha generado controversias y
acalorados debates, como reacción a la idea de que cada persona tiene una
capacidad mental general que puede medirse y cuantificarse con un número. Los
foros sobre educación y los consejos escolares debaten sobre la utilidad y
validez de las pruebas de inteligencia. También argumentan que dichas pruebas
deben utilizarse para colocar a los estudiantes en grupos especiales. Por su
parte los psicólogos del a educación debaten sobre si existe una capacidad
mental general o una diversidad de capacidades mentales específicas, si
nosotros tenemos varias capacidades mentales. A diferencia del peso, la altura
o la edad, la inteligencia no se mide en forma directa, no es posible
observar la inteligencia de alguien con solo fijarse en su cabeza. Solo se
puede evaluar la inteligencia de un alumno en forma indirecta por medio del estudio
de sus actos inteligentes. La mayor parte del tiempo se han aplicado pruebas
escritas para tener un estimado de la inteligencia de los estudiantes.
Algunos expertos describen la inteligencia como la habilidad
verbal y la capacidad para resolver problemas, otros la describen como la
habilidad de adaptarse y aprender de las experiencias diarias de la vida. Si se
combinan estas ideas se llega a la definición tradicional de inteligencia:
habilidad verbal, destreza para la resolución de problemas, capacidad de
adaptarse y de aprender de las experiencias diarias de la vida (santrock 2003).
Pero incluso esta amplia definición no satisface a todos, por ejemplo algunas
teorías consideran que la destreza musical debería considerase como parte de la
inteligencia. Otra definición basada en una teoría como la de vygotsky debería
incluir la habilidad para usar herramientas culturales con ayuda de individuos
con mayor destreza, la inteligencia es un concepto abstracto tan amplio que no
es sorprendente encontrar muchas más definiciones sobre ella. El interés en la
inteligencia se ha enfocado en diferencias individuales y evaluaciones, las
diferencias individuales son las formas consistentes y estables en las cuales
las personas se distinguen unas de otras. Es posible hablar de diferencias en
la personalidad y otras áreas pero es a la inteligencia a la que se le ha dado
la mayor atención y acerca de la cual se han sacado más conclusiones en
relación con las destrezas de los estudiantes.
B. La teoría de las inteligencias
múltiples. La teoría de las inteligencias múltiples es un modelo propuesto por
howard gardner 1999, en el que la inteligencia no es vista como algo unitario,
que agrupa diferentes capacidades específicas con distinto nivel de
generalidad, sino como un conjunto de inteligencias múltiples, distintas e
independientes. Gardner define la inteligencia como la “capacidad de resolver
problemas o elaborar productos que sean valiosos en una o más culturas”.
Primero, amplía el campo de lo que es la inteligencia y reconoce lo que se
sabía intuitivamente: que la brillantez académica no lo es todo. A la hora de
desenvolverse en la vida no basta con tener un gran expediente académico. Hay
gente de gran capacidad intelectual pero incapaz de, por ejemplo, elegir ya bien
a sus amigos; por el contrario, hay gente menos brillante en el colegio que
triunfa en el mundo de los negocios o en su vida personal. Triunfar en los
negocios, o en los deportes, requiere ser inteligente, pero en cada campo se
utiliza un tipo de inteligencia distinto. No mejor ni peor, pero sí distinto.
Dicho de otro modo, einstein no es más ni menos inteligente que michael jordan,
simplemente sus inteligencias pertenecen a campos diferentes.
Segundo, y no menos importante, gardner define la
inteligencia como una capacidad. Hasta hace muy poco tiempo la inteligencia se
consideraba algo innato e inamovible. Se nacía inteligente o no, y la educación
no podía cambiar ese hecho. Tanto es así que en épocas muy cercanas a los
deficientes psíquicos no se les educaba, porque se consideraba que era un
esfuerzo inútil.considerando la importancia de la psicología de las
inteligencias múltiples, ha de ser más racional tener un objeto para todo lo
que hacemos, y no solo por medio de estas inteligencias. Puesto que deja de
lado la objetividad, que es el orden para captar el mundo.
Tipos de inteligencia. Howard gardner añade que así
como hay muchos tipos de problemas que resolver, también hay muchos tipos de
inteligencia. Hasta la fecha howard gardner y su equipo de la universidad
harvard han identificado ocho tipos distintos:
1. Inteligencia lingüística.-
el don del lenguaje es universal y su desarrollo en los niños es
sorprendentemente similar en todas las culturas. Incluso en el caso de personas
sordas a las que no se les ha enseñado explícitamente un lenguaje por señas, a
menudo inventan un lenguaje manual propio y lo usan espontáneamente. En
consecuencia, podemos decir que una inteligencia puede operar
independientemente de una cierta modalidad en el estímulo o una forma
particular de respuesta. Aspectos biológicos – un área específica del cerebro
llamada “área de broca” es la responsable de la producción de oraciones
gramaticales. Una persona con esa área lesionada, puede comprender palabras y
frases sin problemas, pero tiene dificultades para construir frases más
sencillas. Al mismo tiempo, otros procesos mentales pueden quedar completamente
ilesos. Capacidades implicadas – capacidad para comprender el orden y el
significado de las palabras en la lectura, la escritura, y también al hablar y
escuchar. Habilidades relacionadas – hablar y escribir eficazmente.
Perfiles profesionales – líderes políticos o religiosos, poetas, escritores,
etc. 2. Inteligencia lógica-matemática en los
individuos especialmente dotados en esta forma de inteligencia, el proceso de
resolución de problemas a menudo es extraordinariamente rápido: el científico
competente maneja simultáneamente muchas variables y crea numerosas hipótesis
que son evaluadas sucesivamente y posteriormente son aceptadas o
rechazadas. Es importante puntualizar la
naturaleza no verbal de la inteligencia matemática. En efecto, es posible
construir la solución del problema antes de que ésta sea articulada.
Junto con su compañera, la inteligencia lingüística, el
razonamiento matemático proporciona la base principal para los test de ci. Esta
forma de inteligencia ha sido investigada en profundidad por los psicólogos
tradicionales y constituye tal vez el arquetipo de “inteligencia en bruto” o de
la validad para resolver problemas que supuestamente pertenecen a cualquier
terreno. Sin embargo, aún no se comprende plenamente el mecanismo por el cual
se alcanza una solución a un problema lógico-matemático. Capacidades implicadas
– capacidad para identificar modelos, calcular, formular y verificar hipótesis,
utilizar el método científico y los razonamientos inductivo y deductivo.
Habilidades relacionadas – capacidad para identificar modelos, calcular,
formular y verificar hipótesis, utilizar el método científico y los razonamientos
inductivo y deductivo. Perfiles profesionales – economistas, ingenieros,
científicos, etc.
3. Inteligencia
espacial. La resolución de problemas espaciales se aplica a la navegación
y al uso de mapas como sistema notacional. Otro tipo de solución a los
problemas espaciales, aparece en la visualización de un objeto visto desde un
ángulo diferente y en el juego del ajedrez. También se emplea este tipo de
inteligencia en las artes visuales.
Aspectos biológicos – el hemisferio derecho (en las personas
diestras) demuestra ser la sede más importante del cálculo espacial. Las
lesiones en la región posterior derecha provocan daños en la habilidad para
orientarse en un lugar, para reconocer caras o escenas o para apreciar pequeños
detalles.
Los pacientes con daño específico en las regiones del
hemisferio derecho, intentarán compensar su déficit espacial con estrategias
lingüísticas: razonarán en voz alta para intentar resolver una tarea o se
inventarán respuestas. Pero las estrategias lingüísticas no parecen eficientes
para resolver tales problemas. Las personas ciegas proporcionan un claro
ejemplo de la distinción entre inteligencia espacial y perspectiva visual. Un
ciego puede reconocer ciertas formas a través de un método indirecto, pasar la
mano a lo largo de un objeto, por ejemplo, construye una noción diferente a la
visual de longitud. Para el invidente, el sistema perceptivo de la modalidad
táctil corre en paralelo a la modalidad visual de una persona visualmente
normal. Por lo tanto, la inteligencia espacial sería independiente de una
modalidad particular de estímulo
sensorial.
Capacidades
implicadas – capacidad para presentar ideas visualmente, crear imágenes
mentales, percibir detalles visuales, dibujar y confeccionar
bocetos.
Habilidades relacionadas – realizar creaciones visuales y visualizar con
precisión. Perfiles profesionales – artistas, fotógrafos, guías turísticos,
etc.
4. Inteligencia musical los
datos procedentes de diversas culturas hablan de la universalidad de la noción
musical. Incluso los estudios sobre el desarrollo infantil sugieren que existe
una habilidad computacional en la primera infancia hasta que el aprendizaje de
notación musical proporciona más tarde, cuando es aprendido, un sistema
simbólico lúcido y accesible.
Aspectos biológicos – ciertas áreas del cerebro desempeñan
papeles importantes en la percepción y la producción musical. Éstas, situadas
por lo general en el hemisferio derecho, no están localizadas con claridad como
sucede con el lenguaje. Sin embargo, pese a la falta de susceptibilidad
concreta respecto a la habilidad musical en caso de lesiones cerebrales, existe
evidencia de “amusia” (pérdida de habilidad musical). Capacidades implicadas –
capacidad para escuchar, cantar, tocar instrumentos. Habilidades relacionadas –
crear y analizar música. Perfiles profesionales – músicos, compositores,
críticos musicales, etc.
5. Inteligencia corporal
cinética la evolución de los movimientos corporales especializados es de
importancia obvia para la especie, y en los humanos esta adaptación se extiende
al uso de herramientas. El movimiento del cuerpo sigue un desarrollo claramente
definido en los niños y no hay duda de su universalidad cultural.la
consideración del conocimiento cinético corporal como “apto para la solución de
problemas” puede ser menos intuitiva, pero sin embargo, utilizar el cuerpo para
expresar emociones (danza) o para competir (deportes), o para crear (artes
plásticas) constituye evidencias de la dimensión cognitiva del uso corporal.
Aspectos biológicos – el control del movimiento corporal se localiza en la
corteza motora, y cada hemisferio domina o controla los movimientos corporales
correspondientes al lado opuesto. En los diestros, el dominio de este
movimiento se suele situar en el hemisferio izquierdo. La habilidad para
realizar movimientos voluntarios puede resultar dañada, incluso en individuos
que puedan ejecutar los mismos movimientos de forma refleja o involuntaria. La
existencia de apraxia específica constituye una línea de evidencia a favor de
una inteligencia cinética corporal.
Capacidades implicadas – capacidad para realizar actividades
que requieren fuerza, rapidez, flexibilidad, coordinación óculo-manual y
equilibrio. Habilidades relacionadas – utilizar las manos para crear o hacer
reparaciones, expresarse a través del cuerpo. Perfiles profesionales –
escultores, cirujanos, actores, bailarines, etc.
6. Inteligencia intrapersonal
la inteligencia intrapersonal es el conocimiento de los aspectos internos de
una persona: el acceso a la propia vida emocional, a la propia gama de
sentimiento, la capacidad de efectuar discriminaciones entre ciertas emociones y
finalmente, ponerles un nombre y recurrir a ellas como medio de interpretar y
orientar la propia conducta. Las personas que poseen una inteligencia
intrapersonal notable, poseen modelos viables y eficaces de sí mismos. Pero al
ser esta forma de inteligencia la más privada de todas, requiere otras formas
expresivas para que pueda ser observada en funcionamiento. La inteligencia
interpersonal permite comprender y trabajar con los demás, la intrapersonal,
permite comprenderse mejor y trabajar con uno mismo. En el sentido individual
de uno mismo, es posible hallar una mezcla de componentes intrapersonal e
interpersonales. El sentido de uno mismo es una de las más notables invenciones
humanas: simboliza toda la información posible respecto a una persona y qué es.
Se trata de una invención que todos los individuos construyen para sí mismos.
Aspectos biológicos – los lóbulos frontales desempeñan un
papel central en el cambio de la personalidad, los daños en el área inferior de
los lóbulos frontales puede producir irritabilidad o euforia; en cambio, los
daños en la parte superior tienden a producir indiferencia, languidez y apatía
(personalidad depresiva). Entre los afásicos que se han recuperado lo
suficiente como para describir sus experiencias se han encontrado testimonios
consistentes: aunque pueda haber existido una disminución del estado general de
alerta y una considerable depresión debido a su estado, el individuo no se
siente a sí mismo una persona distinta, reconoce sus propias necesidades,
carencias, deseos e intenta atenderlos lo mejor posible. Capacidades implicadas
– capacidad para plantearse metas, evaluar habilidades y desventajas
personales, y controlar el pensamiento propio. Habilidades relacionadas –
meditar, exhibir disciplina personal, conservar la compostura y dar lo mejor de
sí mismo. Perfiles profesionales – individuos maduros que tienen un
autoconocimiento rico y profundo.
7. Inteligencia interpersonal
la inteligencia interpersonal se constituye a partir de la capacidad nuclear
para sentir distinciones entre los demás, en particular, contrastes en sus
estados de ánimo, temperamento, motivaciones e intenciones. Esta inteligencia
le permite a un adulto hábil, leer las intenciones y los deseos de los demás,
aunque se los hayan ocultado. Esta capacidad se da de forma muy sofisticada en
los líderes religiosos, políticos, terapeutas y maestros. Esta forma de
inteligencia no depende necesariamente del lenguaje. Aspectos biológicos –
todos los indicios proporcionados por la investigación cerebral sugieren que
los lóbulos frontales desempeñan un papel importante en el conocimiento
interpersonal, los daños en esta área pueden causar cambios profundos en la
personalidad aunque otras formas de la resolución de problemas puedan quedar
inalteradas: una persona no es la misma después de la lesión. La evidencia
biológica de la inteligencia interpersonal abarca factores adicionales que a
menudo se consideran excluyentes de la especie humana:
La prolongada infancia de los primates, que establece un
vínculo estrecho con la madre, favorece el desarrollo intrapersonal. La
importancia de la interacción social entre los humanos que demandan
participación y cooperación. La necesidad de cohesión al grupo, de liderazgo,
de organización y solidaridad, surge como consecuencia de la necesidad de
supervivencia. Capacidades implicadas – trabajar con gente, ayudar a las
personas a identificar y superar problemas. Habilidades relacionadas –
capacidad para reconocer y responder a los sentimientos y personalidades de los
otros. Perfiles profesionales – administradores, docentes, psicólogos,
terapeutas.
8. Inteligencia naturalista se
describe como la competencia para percibir las relaciones que existen entre
varias especies o grupos de objetos y personas, así como reconocer y establecer
si existen distinciones y semejanzas entre ellos. Los naturalistas suelen ser
hábiles para observar, identificar y clasificar a los miembros de un grupo o
especie, e incluso para descubrir nuevas especies. Su campo de observación más
afín es el mundo natural, donde pueden reconocer flora y fauna, y utilizar
productivamente sus habilidades en actividades de caza, ciencias biológicas y
conservación de la naturaleza. Pero puede ser aplicada también en cualquier
ámbito de la ciencia y la cultura, porque las características de este tipo de
inteligencia se ciñen a las cualidades esperadas en personas que se
dedican a la investigación y siguen los pasos propios del método científico. En
realidad todos aplicamos la inteligencia naturalista al reconocer plantas,
animales, personas o elementos de nuestro entorno natural. Las interacciones
con el medio físico nos ayudan a desarrollar la percepción de las causas y sus
efectos y los comportamientos o fenómenos que puedan existir en el futuro; como
por ejemplo la observación de los cambios climáticos que se producen en el
transcurso de las estaciones del año y su influencia entre los humanos, los
animales y las plantas. Gardner postula que este tipo de inteligencia debió
tener su origen en las necesidades de los primeros seres humanos, ya que su
sobrevivencia dependía en gran parte del reconocimiento que hicieran de
especies útiles y perjudiciales, de la observación del clima y sus cambios y de
ampliar los recursos disponibles para la alimentación.
C. La inteligencia, una
combinación de factores según esta teoría, todos los seres humanos poseen las
ocho inteligencias en mayor o menor medida. Al igual que con los estilos de
aprendizaje no hay tipos puros, y si los hubiera les resultaría imposible
funcionar. Un ingeniero necesita una inteligencia espacial bien desarrollada,
pero también necesita de todas las demás, de la inteligencia lógico matemática
para poder realizar cálculos de estructuras, de la inteligencia interpersonal
para poder presentar sus proyectos, de la inteligencia corporal – cinestésica
para poder conducir su coche hasta la obra, etc. Gardner enfatiza el hecho de
que todas las inteligencias son igualmente importantes y, según esto, el
problema sería que el sistema escolar vigente no las trata por igual sino que
prioriza las dos primeras de la lista, (la inteligencia lógico -matemática y la
inteligencia lingüística).
Sin embargo en la mayoría de los sistemas escolares actuales
se promueve que los docentes realicen el proceso de enseñanza y aprendizaje a
través de actividades que promuevan una diversidad de inteligencias, asumiendo
que los alumnos poseen diferente nivel de desarrollo de ellas y por lo tanto es
necesario que todos las pongan en práctica. Para gardner es evidente que,
sabiendo lo que se sabe sobre estilos de aprendizaje, tipos de inteligencia y
estilos de enseñanza, es absurdo que se siga insistiendo en que todos los
alumnos aprendan de la misma manera. La misma materia se podría presentar de
formas muy diversas que permitan al alumno asimilarla partiendo de sus
capacidades y aprovechando sus puntos fuertes. Además, tendría que plantearse
si una educación centrada en sólo dos tipos de inteligencia es la más adecuada
para preparar a los alumnos para vivir en un mundo cada vez más complejo.
2. Factores externos.-
se
refieren a los aspectos que son propios del mundo que nos rodea y que no
dependen de la persona como por ejemplo: la familia, comunidad, país y el mundo
en general donde una persona vive (valdez 2000).
A. Ambiente familiar. Los padres tienen
una influencia decisiva sobre el proyecto de vida de sus hijos. La profesión
que ellos mismos ejercen, lo que esperan de sus hijos, sus formas de actuar con
ellos y con otras personas, los juicios valorativos o desvalorizantes que
expresan, en síntesis, el permanente modelo en acción que presentan a sus
hijos, les imponen pautas predominantes para sus preferencias y rechazos. Y lo
que es más importante, todo esto influye también en la formación de su
personalidad, cuyos aspectos positivos y negativos pondrán en juego al
desarrollar su actividad. Cuando un hijo está deliberando acerca de su futuro
es como si los padres tuvieran que volver a definirse. Quizá revivan los
momentos en que ellos querían realizar algo que soñaban. La situación parece la
misma, pero es distinta porque ese hijo que está tratando es una persona única,
que se parece a sus padres pero que tendrá que ser cada vez más ella misma y
vivir por sí misma, en una época y lugares distintos en sus circunstancias, con
condiciones y personas distintas.
No hay que pretender que el adolescente elija como adulto.
Su devenir personal posibilitará más tarde si los dejamos crecer. En general la
vocación de los jóvenes no está dada sino que se está dando. Lo que corresponde
a los padres hacer si el hijo no se decide es ayudar a solucionar las causas de
su indecisión o esperar, puesto que no hay una edad fija para saber qué se
quiere ser. A medida que se va viviendo y evolucionando se van aclarando
aspectos de uno mismo y de la realidad externa, se van desarrollando
capacidades, se van dando circunstancias y oportunidades.
B. Situacion socioeconomica todas
las familias viven en una sociedad que comparte una serie de valores y
creencias. En cada tiempo y lugar existen diferentes profesiones que las
personas desarrollan. Las necesidades sociales son factores muy importantes
para tener en cuenta en la elección vocacional. Muchas de las actitudes,
intereses, valores y actividades del adolescente están basadas en la posición
socioeconómica de su familia. Gonzales (1997) indica que probablemente los
jóvenes de clase alta y talento sobresaliente son estimulados a utilizar sus
dotes en mantener la posición familiar, mientras que los de la clase baja nace
un interés por ayudar a otro que se encuentra tanto social como económicamente
en desventaja y cuya situación se asemeja a la de ellos. A partir de lo
anterior podemos concluir que el nivel socioeconómico desempeña un papel
importante en el desarrollo de los intereses, ciertas preferencias pueden
manifestarse en determinados niveles socioeconómicos pero no en otros.
C. Sexo uno de los factores más
importantes en la determinación de los intereses es el sexo, las diferencias
sexuales son características desde un punto de vista físico y sobre todo
psicológico, que existen en cantidades variables. Estas diferencias van a ser
demostradas desde el punto de vista de las capacidades, habilidades, intereses,
aptitudes y rasgos de personalidad. La opinión de los investigadores es unánime
en el sentido de que ciertos intereses son especialmente masculinos y otros
predominantemente femeninos. Al respecto, valdes (2000) nos indica que los
hombres se interesan preferentemente por las actividades físicas, por los
objetos y los problemas mecánicos y científicos, por la policía y el comercio.
Los intereses por el arte, la música, la literatura, las personas, el trabajo
en la oficina, la enseñanza y el servicio social se encuentran a menudo
en las mujeres, es notable que los intereses culturales sean más bien femeninos
y que los intereses masculinos se manifiestan particularmente en el terreno de
la competencia, la construcción y la adquisición de bienes.
D. Escuelas y universidades
Después de la familia, probablemente el agente más importante
de sociabilización y realización sea la escuela. Es a través de ella que el
individuo adquiere un sistema de valores que aprende y pueden facilitar o
retardar su decisión vocacional. Canton (1998) indica que la escuela puede
tener cierto efecto diferencial sobre el proceso de elección vocacional, ya que
es prácticamente la única institución social que difunde información
ocupacional de una manera formal y sistémica.